Las
Cocinas Públicas Hospitalarias. Hoy privadas
Es otra parcela entre
tantas donde poco a poco nos van imponiendo el cambio de Público a privado.
Hoy puede parecer todo
superado, pues ¡no!, ni mucho menos: El
horario de las comidas no está ajustado, más bien llega tarde que temprano. La
comida, si bien se escucha bajito: “algo ha mejorado, aunque ayer me trajeron
una manzana asada todavía congelada y a mi vecina, le trajeron un pescado que
hemos tenido el olor..., bueno aún está en el aire”. Si quieres saber no tienes
más que poner oreja y escuchar.