Tantos meses después de implantar la
privatización de las cocinas hospitalarias y tantos, tantísimos errores,
deberían ser más que suficientes para dejarse de hipocresías, de
justificaciones absurdas, y de mentiras que no hacen sino disfrazar la
auténtica realidad.
Es muy fácil echar la culpa a los trabajadores de uno y otro
ámbito, a los medios de comunicación... a quien sea, con tal de seguir
manteniendo el ánimo de lucro del gran jefe de Mediterránea y de sus
copartícipes en los beneficios económicos. Es muy fácil poner un equipo
que medie en los conflictos pero que, en definitiva, sea solo una
pantalla porque son conflictos irresolubles.
leer mas
No hay comentarios:
Publicar un comentario